11am y la puerta de madera

Ayer llegué a las 10:35 am a tribunales de San Isidro, la audiencia era a las 11:00am .  Me pedí un cortado en un bar, me senté afuera, la calle estaba tranquila.

Pegaba suave el sol de la mañana sobre las ventanas de los edificios que nos rodeaban, y yo, no se por qué razón, estaba tan en calma como la mañana misma. Es que debo confesar que los tramiteríos legales me ponen un poco nervioso, pero estaba muy calmo, y tampoco hacía frío.

Soy yo el que habla y el que narra esta historia, pero durante el fin de semana y hasta el lunes a tardías horas, no era yo, era él y ellos...

Claramente me doy cuenta ahora, con el diario del martes, aunque venía intuyendo que había cosas fuera de su lugar desde hace unos días. Pero bueno, uno visualiza,  hasta que eventualmente las disociaciones llegan para quedarse.

Con el pasar de los años les fui poniendo trampas. No me malinterpreten, yo no sería nada sin ellos, pero antes, cuando todavía escuchaba sus voces altas y claras, eran un tanto mas impredecibles, hacían lo que querían, cuando querían y como querían. Eran practicamente indomables. Ni hablar de los eventos gatillo, esos siguen siendo una tarea difícil, pero de a poco los vamos a solucionar.
Cuando digo trampas digo que en realidad les voy conociendo los rasgos, las formas de contestar. Ya son 26 años de convivencia inconscientes y 5 de convivencia consciente, después de tanto tiempo, es difícil no conocer a 32 personas, 33 con uno mismo, que nunca se termina de conocer.

Tampoco son 33, pero sabemos que a los fines literarios, siempre me gustó el número para decir que son un montón y que " estamos bien los 33".

Entre las trampas aprendí también que pueden adquirir nuevos hábitos, y el que ultimamente no deja de dar la nota con estas apreciaciones es mi querido amigo, el Gremialista.

yo?

Si , vos.

El gremial es....y si, sentate porque te voy a tirar flores...es la fuerza que yo no tengo. Es el que levanta kilos en serio, el que se planta en las peleas, el que no tiembla cuando ve violencia. El es tal vez el que no tiembla cuando dispara (aunque de eso tengo dudas) . Es la furia pero la mano dura de este cuerpo. 

Escribo estas líneas a fin de agradecerte, de alguna manera, por haberme hecho contestar cosas pertinentes el lunes a la mañana, por no haberme hecho ir para atrás el sábado en Devoto, por el coraje y la fuerza del domingo a la noche. Gracias.  A veces no se qué haría sin vos.

De nada, pero te voy a regalar un consejo, ya que no querés pelear conmigo hoy. Ayer mientras tomabas el café te fumaste un cigarrillo.

Si, ya se, porque sabía que en realidad eras vos, sabés que no fumo y que odio el pucho, pero sabía que vos tenías las riendas y de alguna manera tengo que convivir con tus vicios también.

Pero Facu...yo no fumo...

Pero la otra vez en el departamento?

No estabas hablando conmigo Facu, yo seré todo lo que seré, pero también me molesta el cigarrillo...el que fuma es otro de los muchachos.

Y quién es entonces?

Bueno, ahí está lo que nos preocupa...que no lo sabemos.


Y cuando creía tener el control sobre la mente y el cuerpo, me vengo a enterar, que todavía no me conozco del todo. Que todavía no los conozco a todos ellos, que son todos yo y a la vez no. Hasta que punto los puedo poner de excusa por mis propios actos? que serán míos? El accionar de quién es? del cuerpo o de la mente? con ese criterio somos todos culpables, desde el mas culpable hasta el mas inocente, si todos tenemos las mismas dos manos, todos cerramos el mismo ojo para apuntar, todos peleamos igual..amamos igual..sonreímos igual. o no? o me estoy equivocando?...es verdad lo que aprendí aquella vez sentado en un bar tomando una cerveza con Sofía, que medio altanera como es ella me preguntó...:-"Vos sabés lo que es la violencia Facu ?"

Mmmm, la violencia? y no se, enojarse, golpear, putear.

No no, esos son efectos de la violencia...pero la violencia qué es?

Es el uso de la fuerza para imponerse sobre el otro Sofi... o no?

No mi vida, la violencia es la incapacidad de comunicarse con el otro y con uno mismo..

Ah, entonces de ahí parte en realidad? del desconocimiento de uno mismo? de no poder comunicarse con su cuerpo y mente?

Exacto!

Y entonces yo tengo un problema, pensé...y de adentro el Gremialista, ni lento ni perezoso me acotó: No, tenés 33.